En primero tenía a una gorda asquerosa, que lo único que hacía era babear mientras nos hacía leer la biblia. ¡¡¡Joder que nos hacía leer la biblia!!! A que clase de mente depravada se le ocurriría eso. Si nos mandara leer, no se... otra cosa. Luego esa tía se puso mala, y vino a darnos clase un par de gafas. ¿Un par de gafas? Quizá se pregunte alguien que lo lea... Si, vino un tío que creo que estaba haciendo prácticas de cura o algo así, y con ese ya no hacíamos nada de nada, bueno, creo que también nos hacía leernos la biblia, pero porque se lo mandaba la otra puta.
El caso es que a la que sí que tengo grabada en la memoria, es a una auténtica puta que me ha estado persiguiendo hasta que he salido del instituto. Una tía que aunque hubiera dado clase de música, habría seguido siendo igual de puta. Esa tía lo llevaba en los genes. Esa nos hacía leer la biblia, nos llevaba a la capilla del instituto, que ya ves tu para que querrá una mierda de capilla un instituto, nos ponía documentales de otras religiones, que ya ves que interés le pongo a la mía, pues imaginate a la de los demás...
Es que ademas esa tía nos mandaba deberes, y nos los pedía a todos conforme iba pasando lista, y si le decías que no, y algún día se te ocurría hacerlos, o dos, o los que fueran, pues tenías que ir luego a su mesa con el cuaderno en la mano a enseñarselos, porque la muy puta no se lo creía, te ponía la etiqueta y aunque se los hicieras todos los días, si un día le habías dicho que no, no te creía ya para el resto de su vida (ni de la tuya).
Y ya lo que es peor. Los demás profesores de religión que he tenido, tenían sus más y sus menos y tal, pero sabían que su asignatura era una auténtica mierda en comparación con las demás, como debe ser, e incluso tenían asumido que a nosotros la religion nos importaba un capullo, pero es que la puta esta se pensaba que era igual de importante que las matemáticas o la lengua.
Y bueno ya el punto culminante, cada vez que terminaba una evaluación, llegaba la puta y empezaba a preguntarle a todo el mundo por sus notas, conforme iba pasando la lista, y cuando llegaba a uno que le había quedado alguna asignatura en alguna evaluación o que era repetidor, en vez de preguntarle "¿Que tal las notas?", pues iba la Puta (y esto ya lo pongo con mayúscula). y preguntaba, además con sorna "¿Qué? ¿Y a ti cuántas te han quedado?", y ya daba igual que otra evaluación aprobaras todo, que como hubieras suspendido una evaluación algo, te estaba preguntando eso siempre.
En fin...
, y despúes le 
, y luego le daria de comer una 
, para culminar con 
.
